Fondo Cósmico de Microondas (CMB), en 2014. |
Recientemente el divulgador científico español, José Manuel
Nieves, publicó en su espacio del diario ABC un interesante artículo
en el que afirma que el célebre físico, Roger Penrose, encontró una serie de
anomalías luminosas que podrían ser restos de un Universo anterior.
Se trata de extrañas espirales de luz, que serían posiblemente
restos de agujeros negros que habrían sobrevivido a la destrucción de un universo
que existió antes del Big Bang.
«Lo que afirmamos -explica Penrose- es que estamos viendo el
remanente final de un agujero negro que se evaporó en el eón anterior». Junto a
un grupo de colegas, el investigador británico acaba de publicar sus conclusiones
en Arxiv.org.
Roger Penrose |
La anterior explicación cobra sentido con la teoría de Penrose
llama-da «Cosmología Cíclica Conforme» (CCC), según la cual el Universo
pasa por una serie infinita de ciclos (eones), durante los cuales primero se
expande y después se comprime hasta convertirse de nuevo en un punto. Lo cual
podría permitir que, bajo ciertas condiciones, la radiación electromagnética
sobreviviera a la destrucción de un Universo para pasar a formar parte del
siguiente.
«Y esos restos supervivientes son precisamente los que el
físico británico y sus colegas creen haber identificado en el Fondo
Cósmico de Microondas (CMB), la débil radiación residual del Big Bang que
impregna por completo el Universo en que vivimos», comenta José Manuel Nieves.
Puntos de Hawking
Los investigadores han nombrado como «puntos de Hawking» a
los círculos de luz que aparecen en las imágenes, evidentemente en honor al
célebre Stephen Hawking, ni más ni menos quien predijo que los agujeros negros
emitían pequeñas cantidades de radiación electromagnética que los llevó a su
completa evaporación.
Pese a que la «radiación Hawking» no ha sido vista aún,
Penrose considera que ha logrado detectar claros signos de esa radiación
sobrante de un Universo anterior, y afirma que «Hawking habría
estado encantado de ver en una observación real los efectos que él predijo».
Según el físico británico, los «puntos de Hawking» logran
verse nítidamente en un mapa creado por BICEP2,
un radiotelescopio situado en el Polo Sur a través del cual, en 2014, encontraron
una serie de «remolinos» de luz polarizada en el Fondo Cósmico de Microondas. Para
el equipo de BICEP2 esos remolinos fueron causados por las ondas
gravitacionales provenientes del crecimiento del universo después del Big Bang.
Pero Penrose y sus colegas tienen una explicación diferente.
«Según la teoría CCC, toda la energía de un agujero negro
que se evapora se comprimiría en un punto diminuto a medida que el universo se
encogiera, antes de expandirse otra vez en un nuevo eón. No podemos ver los
puntos de Hawking en los datos, dice Penrose, porque las mediciones del Fondo
Cósmico de Microondas solo se remontan a 380.000 años después del Big Bang.
Pero sí podemos ver los anillos luminosos».
Penrose reporta que ha localizaron cerca de 20 áreas de
aumento de temperatura en los mapas de BICEP2; según su estudio por lo menos
una de ellas es un «punto de Hawking», no obstante, señala que otras cuatro o
cinco ameritan estudios más detallados.
Explicaciones
alternativas
Pero ya existen reacciones en el mundo de la física. Algunos
investigadores opinan que las «señales» de Penrose dan lugar a explicaciones
alternativas, por ejemplo, que los círculos luminosos se deban, en realidad, a
una simple curvatura de la luz al pasar cerca de algún objeto masivo.
Sin embargo, Penrose y su equipo descartan otros
resultados utilizando mapas del CMB hechos por el telescopio espacial Planck,
anterior al BICEP2, lo cual lleva a Daniel An, uno de los firmantes del
artículo, a explicar que esos puntos no surgieron por casualidad, sino, «como
consecuencia de algún fenómeno físico». Lo cual apunta a que la teoría, y las
observaciones de restos de un Universo anterior, son correctas.
Artículo escrito con información de la colaboración de José Manuel Nieves (@josemnieves) en el diario ABC, titulada
«Afirman
haber encontrado restos de un Universo anterior».